Desconocemos cuál es el camino que te trae desde tu casa al trabajo, pero lo que sí sabemos, casi seguro, es que tu recorrido se encontrará completamente iluminado.
Para los que acuden a su oficina por la zona de Muzkiz, por ejemplo, llega un momento a la altura del alto Montano en el que todo pasa a estar de repente iluminado. Continuará alumbrado hasta llegar al Parque Tecnológico, 20 Km después. Durante el trayecto recorreremos un corredor encendido que podría medirse en luxes, vatios o euros.
Un cálculo aproximado nos extrapola que si hemos circulado durante 20 km por un corredor con luminarias a cada lado (y en el centro) situadas con un espaciado de 3 por cada 100 metros obtenemos un resultado de unas 90 luminarias por kilómetro o, unas 1.800 únicamente en el trayecto Muskiz -Derio.
Suponiendo que están siendo alimentadas por lámparas de vapor de mercurio de 300 W resulta una potencia necesaria para iluminar ese recorrido de 540 kW. Este consumo se produce de media 12 horas al día y durante los 365 días del año. Considerando un coste del kWh de 8c €/kWh, el gasto en iluminación anual en este tramo es de unos 63.000 €.
La iluminación se encuentra por doquier. Continúa por el Txorierri en dirección hacia Lezama, por Santo Domingo en dirección hacia Bilbao, por Cruces… En general, en todas y cada una de las carreteras dentro del área de influencia de Bilbao.
Consumo energético y costes
No sería descabellado por tanto dilucidar que si contabilizamos la potencia consumida en la iluminación de todas estas carreteras obtengamos un consumo distribuido superior al MW de potencia. Esto implica un coste anual de energía de unos 350.000 €.
El consumo además se caracteriza por consistir en la suma de muchos pequeños consumos distribuidos. En ningún caso por ser total y local. Aprovechar para mejorar la calidad de la red con esta distribución o, para aprovechar potenciales es uno de los objetivos que debemos llevar a cabo.
Necesitamos centrar nuestros esfuerzos en el potencial de ahorro con el cambio de tecnología, de la nueva regulación de la iluminación en función de la densidad de tráfico, de las posibilidades de utilizar redes de distribución de corriente continua para el funcionamiento con tecnología led...
Estos indicadores permitirían una regulación de potencia mucho mas amplia y rápida. Además de que estos equipos electrónicos, que también se encuentran distribuidos por la red, pueden contener la inteligencia para medir caudal de coches, accidentes, sensores...
Tal vez, ¿habría que pararse a pensar en lo que supone la existencia de la iluminación en nuestra sociedad?