El desarrollo de la Inteligencia Artificial tendrá que hacer que los filósofos desempolven sus viejos libros de filosofía para repasar con ellos los antiguos conceptos de Ser Humano, Inteligencia y Posición en el Cosmos.
Verán con añoranza cómo lo que comenzara siendo un apéndice divino puesto en la única Tierra que existía por el mismo Dios (y por tanto con una posición privilegiada sobre el resto de vidas que lo habitaban), poco a poco fue convirtiéndose en una especie más, de entre las muchas posibles que habitaba un minúsculo planeta de los muchos que había: solo que con una evolución un poco más refinada para pasar a ser una Esencia que solo alcanzaba su conciencia por medio de los Lenguajes que habitaba, y sin los cuales nunca podría salir de su nada.
Estos lenguajes, que toda Inteligencia tiene que habitar para poder Ser, no solamente tienen que ver con las cadenas de palabras sino que en su sentido más general tienen que entenderse como cualquier conjunto de reglas sobre el que sea posible algún tipo de comprensión:
Así, el mundo exterior se comprende sobre la base de un lenguaje cuyas reglas nos permiten salir a la calle con la certeza de que no vamos a salir volando ni vamos a ser tragados por el suelo.
- La matemática es otro Lenguaje cuyo conjunto de reglas nos permite elaborar complejas teorías con grandes consensos.
- El juego del ajedrez donde dos jugadores interaccionen sin discusión durante largos periodos de tiempo de manera ordenada y sin cuestionar el resultados.
- Los Convenios Colectivos que convierten en legitimas unas reglas que se acuerdan entre dos partes.
- El diagnóstico de las enfermedades cuyo lenguaje está basado en las reglas que nos dicen que a toda enfermedad le corresponden unos síntomas concretos que son siempre iguales.
Por el momento, a las inteligencia artificiales se les ha puesto a trabajar sobre los sistemas de reglas más sencillos que se conocen . Su desempeño ha sido mejor que el alcanzado por las inteligencias naturales sobre esos mismos sistemas: las Damas, el Ajedrez, el GO, el Póker. También se ha comprobado su capacidad para desarrollarse dentro de otros sistemas más complejos como son la interacción con los Social Media o, la Interacción directa con personas.
Si las reglas de los primeros son constantes y conocidas, las de los segundos se caracterizan por ser desconocidas y además por poder cambiar con el tiempo. Cambian con el tiempo, por ejemplo, en el sentido de que las emociones pueden hacer que lo que hoy es odio mañana sea afecto; y son desconocidas en el sentido, de que nadie ha sido hasta el momento capaz de definir el conjunto de reglas que permiten algo tan sencillo como es el reconocimiento facial.
Sin embargo, las nuevas inteligencias artificiales basadas en las learning machine superan estos inconvenientes: no necesitan conocer el conjunto de reglas, sino que son capaces de aprender por sí mismas en base a la propia experiencia que van adquiriendo en su interacción con el entorno.
La pregunta que cabe hacerse entonces es si estas inteligencias artificiales, que como se puede ver son capaces de habitar y desarrollarse dentro de estos lenguajes, ¿serán capaces algún día de alcanzar su propia conciencia por medio de ellos? Pero si las inteligencias naturales de base biológica llevan millones de años de evolución, las nuevas inteligencias artificiales de base electrónica apenas han tenido unas pocas decenas de años de progreso.
Las nuevas reglas de juego
En el juego de las Damas el programa Chinook no solamente fue capaz de derrotar a la inteligencia humana, sino que encontró una solución óptima al juego: cualquier contrincante que se enfrentara a ella y ejecutara movimientos distintos de los propuestos por ella, vería irremediablemente como terminaría perdiendo la partida. El juego de las damas quedaba resuelto de manera perfecta para siempre, y sin margen de mejora.
Pero las reglas de las Damas eran demasiado sencillas y su combinatoria muy reducida, por lo que el siguiente reto se puso en comprender las reglas del Ajedrez. Después de mucho trabajo y muchas versiones, en 1997 IBM desarrollaba una supercomputadora llamada Deep Blue que era capaz de vencer por primera vez a un campeón mundial de la talla de Kaspárov de manera notoria. Desde entonces, ningún Gran Maestro ha osado enfrentarse en un match contra una Inteligencia de este tipo ya que sus posibilidades de éxito serían nulas.
Aunque el juego del Ajedrez permite una combinatoria muy superior al de las Damas, no permite una tan elevada como lo hace el juego del GO. Ninguna computadora ni presente ni futura será nunca capaz de sondear esta combinatoria por completo: obliga a que tarde o temprano tengan que tomar decisiones sin haber podido analizar todos los escenarios posibles, sin conocer con certeza las consecuencias de su decisión (al más puro estilo del existencialismo sartreano). Dentro del proyecto desarrollado por Google conocido como Deep Mind se creó la máquina conocida como AlphaGO que fue capaz de derrotar al mejor jugador de GO por un resultado de 4 a 1.
Pero si AlphaGO fue programada a priori por los ingenieros para aprender de las más de 200.000 partidas jugadas anteriormente por los mejores jugadores, su versión mejorada AlphaGO Zero tuvo que aprender por sí sola, desde cero, y conociendo solamente las reglas básicas del juego. Sin haber visto nunca antes una partida, comenzó a jugar contra sí misma una y otra vez para ir aprendiendo de sus errores. La primera partida, la jugó moviendo aleatoriamente, sin ningún criterio ni conocimiento sobre tácticas o estrategias; a las tres horas de enchufar la máquina atrapaba fichas mejor que un principiante. En 70 horas era una experta capaz de jugar contra los mejores jugadores del mundo. Después de tres días y casi cinco millones de partidas jugadas contra sí misma, AlphaGoZero estaba lista para enfrentarse a su antecesora AlphaGo y derrotarla por un resultado de 100 a 0.
Y también en el póker, un juego de información imperfecta o incompleta que se caracteriza por la presencia del farol y la ausencia de determinismo, la IA fue capaz de batir a los mejores profesionales rozando un resultado del 100 % sobre más de 120.000 partidas jugadas.
Learning machine
Las nuevas máquinas, basadas en el learning machine, han dejado de ser tautologías que solamente repiten aquello que los programadores han incluido previamente en ellas, sino que son capaces de aprender de su interacción con el entorno para auto programarse durante el proceso.
¿Serán algún día capaces de desarrollar el Pensamiento Puro en lugar de aprender solamente de su experiencia (ser racionalistas y no empiristas)? ¿podrán plantearse las 7 conjeturas de la matemática moderna? ¿mejorar la belleza de un poema? ¿podrán plantearse algún día el Cogito Cartesiano del pienso luego existo?
Como es obvio, el debate actual sobre este tipo de inteligencias no ha pasado desapercibido, una de cuyas ramas se encuentra en la pregunta sobre si serán capaces de alterar el orden económico moderno para reinventar un nuevo capitalismo; si estas inteligencias llegarán con el tiempo a realizar todos los trabajos que hoy en día realiza la clase media (diagnóstico de enfermedades, cálculo de estructuras, predicciones en los mercados financieros…).
¿Se llegará con el tiempo a una sociedad en la que la clase media se haya estrechado tanto, como consecuencia de la aparición de estas inteligencias, quedando solamente dos clases, la alta y la baja, cada vez más separadas y mucho más engordadas?