Blog

Oxígeno para el mercado digital europeo, DSM

12 de Julio de 2016
Tabla de contenido0

Como bien decía Guillermo Gil en su post sobre la Intermediación Digital con los clientes el reto de la transformación digital requiere de "…alianzas y medidas extraordinarias en fondo y forma". En el campo de la intermediación digital nos cansamos de criticar la falta de “campeones digitales” en Europa, y siempre miramos a los grandes nombres que vienen de los EE.UU. ¿No será que falta una medida extraordinaria, y con urgencia?

Una de las claves de dicha capacidad de intermediación es el dato. Hoy día, todos los medios de comunicación hablan sobre "Big Data" aplicado a mil y un casos de negocio. Algunos relevantes y otros no. ¿Qué es eso que hace relevante a un conjunto de datos? Simple; su valor como bien identifica la asociación Big Data Value. Valor que por otro lado tiene tantas formas de definición o medición que sin pretender profundizar mucho entendemos por el libre intercambio entre un demandante y el oferente por un importe dado. Algo que, en el caso del comercio de datos, es un negocio ya muy tradicional y establecido.

En mi caso descubrí un nuevo mundo asociado al comercio de datos cuando en 2004 fui invitado por una reconocida empresa de marketing francesa a conocer cómo se elaboran las listas de datos que posteriormente provocan las campañas comerciales a las que tan acostumbrados estamos. Un mundo donde grandes, medianas o pequeñas empresas venden bases de datos enteras con información de sus clientes a otras que actúan como mediadores, brokers. Estos acumulan listas y generan nuevas listas para empresas que necesitan datos óptimos para sus campañas comerciales. Todo legal y controlado, aunque con una regulación y control diferente por cada país lo que ha provocado que dicho comercio haya estado limitado a pesar de la aparición de nuevas tecnologías asociadas a la analítica de datos.

Nos parezca o no legítimo que empresas hagan negocio con nuestros datos, si nosotros como consumidores aceptamos las reglas de uso de sus productos y servicios poco podemos reclamar. ¡Ojo con lo que aceptamos!. Lo cierto es que mientras que una empresa “de la economía de datos” en los Estados Unidos tiene acceso a un mercado interno enorme, en Europa, esto hasta ahora ha sido mucho, mucho más difícil.

Ahora, una de esas medidas extraordinarias en fondo y forma se pone en marcha dentro de una alianza llamada “Unión Europea” que a veces se ataca con más prejuicio que conocimiento, como hemos visto recientemente en ese enorme engaño que ha supuesto el Brexit. Se trata del largamente reclamado mercado único digital, más conocido como “Digital Single Market” o simplemente DSM.

¿Por qué si el mercado de servicios online a través de internet es prácticamente parejo en volumen entre los EE.UU y la Unión Europea solo un 9% funciona de forma transnacional? Con un mercado de 315 millones de internautas en Europa, no atacar ese problema ha sido un gran (y costoso) error. Ahora DSM pretende que Europa, o los que quedemos en Europa, con tanto escapista, se comporte como un mercado único digital y que la startup digital que nace en Vitoria, Siracusa o Rovaniemi tenga acceso a todo el mercado de la Unión, de manera similar a lo que ocurre en los EE.UU.

No nos olvidemos de que el mercado interno es clave para que dichas empresas escalen y las GAFAs actuales (Google, Amazon, Facebook o Apple) siguen contando con su mercado local como el más importante.

¡Dejemos que las empresas digitales en Europa escalen con un nuevo mercado único!

Joseba Laka Mugartza

SOBRE EL AUTOR

Joseba Laka Mugartza

Desde que descubre el software sobre un ZX Spectrum allá por 1983 hasta hoy es un apasionado de las tecnologías y de las personas con interés por las tecnologías.

Leer más +

Autor:Joseba Laka Mugartza
Suscríbete a nuestras comunicaciones
CUÉNTANOS TU OPINIÓN
0 comentarios
CUÉNTANOS TU OPINIÓN
*campos obligatorios